martes, 14 de agosto de 2012

Carta a los niños. (nenes y nenas)

Se vienen ondonadas de ostias... os podéis ir preparando, hijos. Estáis de vacaciones desde junio y vuestros papis llevan meses detrás vuestro. No habéis hecho ni un cuadernito de las vacaciones y solamente os interesa la posesión del mando a distancia y probar posturas en el sofá.. Con una pierna por el brazo... las dos piernas por la cabeza... la cabeza en la alfombra mientras pones un pie en la lamparita... vas cambiando los canales con el dedo gordo... y tantas cosas que se pueden hacer cuando es  #summertime... tiempo de disfrutar. Perooooo...  mucho me temo criaturas divinas, que estamos a la mitad del mes de agosto, y que algo va a cambiar. Decía que vuestros papis necesitan descansar del trabajo y ahí estáis vosotros. Sois queridos, muy queridos, pero sois pesaooosss... ¡cagüendiez! ¡Recoge tu cuarto! es ahora... no cuando acabes la partida... -que no puedes guardar, te jodes-
¡A la ducha!.. también es ahora... ¿qué esperas, el Santo Advenimiento?
¡A desayunar, a comer, a cenar, a la cama! son expresiones imperativas que no tienen demora, no están sujetas a cambios de opinión ni canjeo por otras, no son negociables.
Se viene el mes de descanso de tus papis y sé que se repetirá en las playas de toda España.. habrá collejas, habrá "niñocojones no puedo más de él", habrá.."solotengoganas de que empiece el colegio" Pero sé perfectamente que lo entenderéis. Pedid un helado y vigilad no mancharos la ropa, los helados tiene magnetísmo hacia la ropa blanca, celeste o rosita que vuestra mami os a lavado y planchado para que salgáis lustrosos de casa. Procurad llevaros la botellita de agua porque no se puede porculear a los cinco minutos de salir de casa... tengo sed... habéis de salir meados y cag..  arreglados. Si seguís estos consejos de vuestro tío Peplluís... igual os salvareis de más de una leche. Y aunque os den pensad que lo hacen por vuestro bien, para que aprendáis que cuando seáis mayores también os darán, de hecho nos dan y mucho. Por todos los lados. Suerte y al toro.

domingo, 5 de agosto de 2012

Se busca director de orquesta

Y me preguntaban el otro día de dónde saco tiempo, que si no duermo, que cómo lo hago.... Pasando a otro orden de cosas, me he parado a pensar en los directores de orquesta... 
Gergiev, con su cara de abstraído loco y sin batuta. Abbado, con su clásico movimiento de la mano izquierda tan imitado por muchos. Mehta y su capacidad de dirigir de memoria. Rattle con ese sincronismo espectacular que le llevó a crear la banda sonora de El Perfume. Barenboim y su sentido del humor con el público en la Marcha Radetzky. Karajan el autoritario e impresionante director. El carismático Bernstein.... etcétera etcétera.... Hay un largo, muy largo elenco de figuras con distintos estilos, personalidades y puestas en escena con un punto común: Garantizar la armonía de un conjunto.

Hacer que cada instrumento entre en el momento oportuno con la fuerza o la sensibilidad o lo que en ese momento se precise, para que la pieza se vaya tejiendo y el resultado sea brillante.
Para todo ello, el director debe llevar el tempo de la acción y se adelanta a cada uno de los instrumentos con un gesto, una mirada, una señal y advierte al músico "ahora vas tú". Requiere una absoluta sumisión a obedecer por parte de los que componen la orquesta.  El resultado es que el conjunto es aplaudido por un público que se pone de pie y un director que humildemente hace una reverencia y obliga a levantarse a sus músicos que reciben una ovación.

Hoy domingo, ahora sentado en un balcón, escuchando el trinar de los pájaros de ciudad. Pienso, qué falta más grande nos hace un buen director de orquesta. De esos que saben llevar el ritmo, que piden esfuerzos pero regalan resultados. 
Mucho me temo que lo que tenemos no sabe marcar el ritmo con un tambor de feria. Hace entrar las flautas cuando tocan los violines.  Trombón cuando es una viola y percusión cuando toca silencio.
Para saber dirigir bien, has de ser músico, has de sentir la música como un sentimiento y no como un trabajo remunerado. Y ser muy humilde. Tener sentido común y coherencia.
A mi me enseñaron a empezar con una clave de sol en el inicio del pentagrama. Hoy hace sol... que busquen la clave perdida. #summertime